AUTOPSIA DE UN OSCURO
Hoy haremos una autopsia a los oscuros, diseccionando cada parte de su cuerpo energético para comprender y explicar cualquier duda que pueda surgir respecto a sus reacciones y nuestro correcto accionar hacia ellos. Si bien todo lo relatado en la anterior nota sobre los cosechados y los hijos de las sombras ya fue dicho en artículos anteriores, es en este momento que su consciencia pudo empezar a abarcar y contener tales conceptos, pues ahora se encuentra en un proceso de expansión que poco a poco comenzará a tocar estratos superiores dentro de su misma realidad, pero desconocidos para aquellos que recién comienzan a recorrer las distintas dependencias de nuestra existencia.
Es imprescindible que tengan claro todo los conceptos, definiciones y relaciones concernientes con el Ser, el espíritu, el alma y la unidad de carbono, como los de consciencia del Ser, consciencia artificial y personalidad virtual. Recomiendo la relectura como mínimo de una octava completa, ocho repeticiones, para comprender de forma correcta estos conceptos, pero como sé que esto no sucederá, me dedicaré a explicar esta autopsia como si lo hubieran hecho, y quedará en cada uno de ustedes el interpretar de forma correcta el contenido de lo transmitido, o adaptarlo a su actual expansión de consciencia correspondiente a su nivel de interpretación. Primeramente tenemos que saber que nosotros como vehículo (merkaba) somos un conjunto de “cuerpos energéticos” compuestos por información consciente. Cada uno es un vehículo adaptado para cada espacio matricial por el que la consciencia del SER se mueve. Nosotros le damos mediante nuestra particular consciencia, el orden al caos natural de nuestras existencias. Nuestro cuerpo físico es parte del universo que se adapta a nuestra esfera de consciencia para darle sentido a esta realidad, es un contenedor, un Avatar construido con los elementos de este plano tridimensional. Cada cuerpo energético está construido con los elementos del espacio matricial por donde se desplaza, sea mental, etérico, espiritual o cualquier otro, por darle unos nombres a lo innombrable, pues estos arquetipos son imperfectos y acotados a nuestra esfera perceptiva y centros de control que procesan la información consciente de nuestro particular paradigma de existencia.
En esta realidad y espacio matricial el vehículo de desplazamiento e interacción es nuestro cuerpo físico, y el conductor o navegante, nuestra consciencia artificial mediante la personalidad virtual. Mientras no poseamos un cuerpo de enlace espiritual, el encargado de mantener la conexión automática e inconsciente con el Ser es el alma, un cuerpo de enlace perteneciente al espacio matricial etérico y otorgado por derecho de vida o mejor dicho, de existencia inconsciente. Todo vehículo tridimensional tiene alma, sea un objeto animado o inanimado, sin embargo el espíritu, como ya expliqué, es un cuerpo de enlace que se forma y se obtiene por derecho divino cuando un objeto se transforma mediante la alquimia del trabajo en un sujeto. Resumiendo, el espíritu se forma y se otorga por derecho divino y el alma se obtiene por derecho de vida. Esto sucede porque el espíritu es un cuerpo perteneciente a los mundos superiores y su materia está formada por consciencia. Ahora sabiendo esta composición, que no es la total pero si la que nos interesa en este momento, podemos entender que cada cuerpo energético es un vehículo material para su espacio matricial, e incorpóreo e inmaterial para un espacio matricial diferente. Para el espíritu nuestro cuerpo físico y álmico es inmaterial, como para nuestro cuerpo álmico el físico y espiritual es inmaterial. Todo depende en dónde se ubique nuestra consciencia artificial para que algo sea material o no, sea real o irreal, verdadero o falso, pues éste es el universo de la dualidad y así se mueve nuestra percepción hasta que la consciencia no se expanda y abarque la trialidad.
Un oscuro se caracteriza por ser un sujeto cuya consciencia artificial está conectada a una sombra que lo parasita y manipula a su antojo a través de la personalidad virtual, pero que puede o no estar cosechado. Esto puede ser por varias causas, una es que tenga el espíritu en formación y en ese caso tenga un proto-enlace con su Ser, que impide que la sombra se adueñe del contenedor, pero sus pensamientos, palabras y actos permiten que ésta se conecte mediante el cuerpo de enlace alma al contenedor físico. Otra puede obedecer a que sea un programa virtual, y en ese caso es un vehículo pero no un contenedor, pues no le entrega energía a la sombra al ser un programa de relleno sin auto-control que pueda generar exo y endo energías. En el caso del cosechado, la sombra luego de parasitar al sujeto y comprobar que éste no tiene el cuerpo espiritual que impida la cosecha, corta el enlace natural del Ser al apropiarse del alma y se enlaza directamente a la consciencia artificial del objeto dejando de ser humano, pues la humanidad está dada por el SER y no por el cuerpo energético o vehículo de desplazamiento. El Ser vuelve a adquirir su consciencia real, su estado de libertad, como sucede en el momento de la muerte física de un sujeto, y el cuerpo queda en este caso vivo pero sin consciencia propia, es un “muerto vivo” cuyo enlace es ahora con una sombra. Estos oscuros se transforman ahora en daimon o Seres creados por el Demiurgo, demonios hijos de las sombras que tendrán su propia octava. La personalidad virtual sigue en funciones, aunque la mayoría de las veces cambia, pues ahora la sombra domina la totalidad del avatar, y ustedes verán por fuera a fulano que conocen de toda la vida, pero por dentro será un Daimon del mental, una sombra.
Un oscuro no responde igual que un humano, pues su alimento es diferente al nuestro, nosotros tenemos un grado de consciencia que necesita para funcionar un cierto tipo de energías que los oscuros no soportan, por tal motivo no se puede utilizar el mismo esquema que con un humano para ayudarlo en su expansión de consciencia. Para comprender esto es necesario comprender que el amor como energía es lo mismo que el odio, la diferencia está en cómo los centros de control procesan esa energía primordial y la transmutan con su alquimia, en una cosa u otra. La reacción de un oscuro ante el amor, es el odio, pues éste es inversamente proporcional a la intención inicial de la energía primogénita. Esto sucede porque el principal alimento de la octava de una sombra es el miedo, y éste es un desecho del centro instintivo, producto del procesamiento de la energía del inconsciente colectivo. La triada energética de una sombra no es Carbono, Oxígeno y Nitrógeno (C-O-N), su triada es Nitrógeno al cubo (N³), pues su alimento físico es el miedo, respiran pasiones y su catalizador es el odio, un nitrógeno de las endo-energías, un nitrógeno de los desechos del amor y un nitrógeno de las exo-energías. Una sombra transmutará todo para conseguir su alimento, así que lo principal al enfrentarla es nunca hacerlo desde del odio, pues éste es el catalizador para conseguir sus hidrógenos. Tampoco es conveniente hacerlo desde el Amor, pues lo transmutará en odio, así que la única manera de enfrentar a un oscuro es mediante la autoridad del decreto desde el centro espiritual superior, con el material con que está construido el espíritu, la consciencia del Ser y sin portar ningún nitrógeno del centro emocional que pueda alimentar a la sombra del oscuro.
En esta autopsia podríamos seguir diseccionando por un largo rato, pero esto es suficiente para comprender la naturaleza y el proceso de cosecha de un oscuro por una sombra. Recomiendo la relectura de escenario uno, para comprender qué las impulsa a hacer lo que hacen, aunque eso también merezca un artículo aparte que quizás desarrolle en un futuro, mientras tanto lo mejor es que comprendan finalmente a qué fuerzas nos enfrentamos para que no subestimen su poderío y que sea tarde para accionar, porque una sombra ya domine su consciencia artificial.
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