El hombre moderno vive bajo la ilusión de creer saber lo que quiere, cuando en realidad desea realmente lo que se supone que ha de querer.
Que días aquellos cuando la libertad parecía rondar entre nosotros, cuando aun nos sentíamos frescos describiendo mundos no organizados, pero mi, querido amigo ,la vida ha cambiado y nosotros ya no somos lo que quisimos ser, ni tan siquiera nos conocemos como hombres.
El mundo que me lleva por las calles como hoja al viento, contemplado el discurrir diario y preguntarme cual es mi sitio en este mundo.
Dejando mi tiempo y mi energía en las vidas que no me pertenecen y no me dicen nada, a los ojos de la verdad.
Somos víctimas de la proclama del destino, de una carencia de ilusión y consecuentemente de un exceso de seguridad y eficacia.
El miedo a ser yo mismo a dejarme llevar por criterios que no son míos., Gravados en mi cabeza a cincel . Sentir que la vida que llevamos es una vida de desarraigo de nosotros mismos, de quimeras llenas de esperanza ciega en un absurdo devenir, que por venir nunca llega .
Nos vemos en el reflejo de la vida como un parasito que desgarra con su hambre el cuerpo que lo alberga. Condicionando nuestra vida a nuestros límites de existencia a todas luces efímera .
¿La vida?, hay la vida que explicaciones me daban los maestros de la nada, para decirme como debo sentirme quien soy, pero yo respondo ¿quien queréis que sea?
Nunca me he visto con mis propios ojos los ojos de vuestro mundo son los que me han mirado, los míos buscan la vida, miran el paraíso interno que debemos de encontrar, olvidando vuestra efímera e irracional existencia.
Propósitos de un propósito, damos la explicación que nunca conoceremos en el mudo de las realidades los vientos elevan los caminos al cielo.
¿Qué piensas de ti mismo?, ¿Quien eres en realidad?
Tenéis un propósito real, sabéis si sois reales o simplemente un pequeño estimulo de una vida efímera.
O un buen bocado suculento para esas energías descomunales que solo te aprecian como un pequeño haz de luz.
Ruidos que nos quieren explicar la realidad, formas de vida creadas para la nada para la muerte que viene o que, está
Realmente os habéis mirado al espejo y habéis descubierto quienes sois vosotros en realidad.
Aquella tarde al contemplar la afilada hilera de arboles, intuí el carácter de mis pensamientos.
Así que nunca encontraría aquel escurridizo y sombrío destino. Aquella autenticas tempestades formadas desde los abismos del destino no eran más que pequeñas brechas en la extensión de mi pensamiento.
Que desordenadamente fluían en mis aventajadas estelas deformadas situándose en la estrechez en una perniciosa y encastrada vida.
Los mares de enternas profundidades abrazaban la voluntariosidad de aquellas quimeras fratricidas, descomponiendo un nuevo orden de reacción bajo las fronteras físicas de su propia naturaleza.
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